Presupuesto Público y Bienestar: un encuentro con alumnos de economía del Tec de Monterrey
El viernes pasado (12ago23) tuve el gusto de participar en el primer encuentro nacional de estudiantes de economía del Tec de Monterrey. Fue organizado por las sociedades de alumnos de los campus Monterrey, Ciudad de México y Santa Fe.
Hablé junto con nuestra decana académica (Grisel Ayllón) del presupuesto público y el bienestar. Los alumnos hicieron preguntas muy interesantes. Abajo resalto algunas que se me quedaron grabadas.
Como contexto mínimo, debo mencionar que fui muy vocal que el grado bajísimo de la recaudación en México (18% del PIB) comparado con OCDE (34% PIB), EE.UU. (26%), América Latina (22%) es una de las explicaciones plausibles de la falta de crecimiento económico acelerado en el periodo de liberación de la economía de las últimas décadas.
P1: ¿Qué tan probable es que la baja recaudación explique la falta de crecimiento si otros países de América Latina que sí recaudan tampoco han tenido crecimiento económico sostenido? Por ejemplo, Brasil o Argentina.
R1: Aunque hay muchas teorías (demasiadas) de por qué la estabilidad macroeconómica y la apertura comercial no fueron suficientes para tener crecimiento, casi seguro la estabilidad macroeconómica es necesaria para tener crecimiento sostenido. Y los países de sudamérica citados no han sobresalido por su buen control de la estabilidad macroeconómica. Definitivamente no por encima de México.
P2: ¿Qué le faltó a mi generación que estaba tan obsesionada con el crecimiento económico pero no mostraron una compromiso social con reducir la desigualdad?
R2: Creo que es demasiado simplista decir que los economistas de mi generación tenían falta de compromiso social. Sería todavía un peor error pensar que resolver problemas sociales antiguos es sólo cuestión de voluntad.
Mi teoría alternativa es que estábamos demasiado influidos por el inmenso potencial del crecimiento económico para sacar a personas de la pobreza. Sobre todo al ver lo que estaba sucediendo en China, donde decenas de millones dejaron la pobreza. En ese entorno, era fácil imaginar que la desigualdad en un entorno de crecimiento era una cuestión de segunda importancia o manejable.
Sí me parece justo criticar que cuando estudié había menos comprensión del potencial destructivo de la desigualdad. Ciertamente no teníamos acceso a la investigación de Acemoglu y coautores sobre el potencial de la desigualdad de cooptar instituciones políticas o anti-monopolios. Tampoco imaginábamos que el salario mediano se estancaría por décadas.
P3: ¿Cómo evaluar el impacto de género del presupuesto público cuando las agencias involucradas no reportan datos al respecto?
R3: Aquí fui crítico en señalar que hay retos muy sustanciales en organizar la coalición política de mujeres para pedir enfoque de género en el gasto. Esto por el viejo dilema de Olson sobre el reto de la acción colectiva entre grupos grandes dispersos vs. grupos pequeños cohesionados.
Por otra parte, fui optimista que un grupo relativamente pequeño de mujeres bien preparadas puede incidir en exigir que haya más datos, o incluso en cruzar las bases de datos existentes para mostrar el impacto de género. No resistí recomendar leer el libro de Mujeres Invisibles de Caroline Criado Pérez (https://carolinecriadoperez.com/book/invisible-women/).